







El complejo de carotenoides consiste, como su propio nombre indica, en una mezcla de carotenoides, los cuales son pigmentos amarillos, naranjas y rojos producidos por plantas, algas y bacterias fotosintéticas. Pues bien, los carotenoides se pueden clasificar en dos grupos principales que son las xantofilas y los carotenos y ambos grupos tienen propiedades antioxidantes, siendo por tanto sustancias que ayudan al organismo a defenderse frente a infecciones y a estimular el sistema inmunológico. Los carotenoides provitamina A (como el betacaroteno) se pueden convertir en vitamina A, la cual es necesaria para el crecimiento, la función del sistema inmunológico y la salud ocular. El complejo carotenoide se puede usar para proteger y mejorar la visión, cuidar el sistema cardiovascular, prevenir y ralentizar algunos cánceres, mantener la piel joven y sana, reforzar los huesos y los dientes, prevenir el daño oxidativo y controlar las membranas mucosas. Es ideal para aquellos que no toman suficientes verduras y frutas en su dieta. Finalmente, este IC se ha creado con betacaroteno, alfacaroteno, gammacaroteno, licopeno, luteína y zeaxantina.