


El Vino es el remedio ideal para todas aquellas personas que se conocen muy bien a sí mismas y que piensan que saben lo que es mejor para los demás. Son fuertes y disfrutan de su capacidad para ejercer el poder, pero en sus estados más extremos y negativos pueden intentar dominar a los demás solo por la fuerza. Los padres tiránicos y los jefes autoritarios son los ejemplos típicos de personas Vino más negativas, ya que esperan una obediencia absoluta por parte de los demás y no les interesa especialmente ganarse el afecto de los demás en tanto que se sigan sus órdenes. En este sentido, Vino es un estado muy diferente al de "Vervain" o Verbena. Las personas verbena intentan cambiar la forma de pensar de otras personas; en cambio, las personas vino solo aspiran a una simple imposición de su filosofía. En su versión positiva, estas personas vino son guías sabias, amables y amorosas que pueden inspirar y liderar a otros sin recurrir a la fuerza. Así pues, cuando caemos en la tendencia de dar órdenes a la fuerza, se puede usar este remedio para ayudarnos a mostrar ese lado positivo. Se recomienda en todas aquellos casos de personas que sienten que saben más que otras, menosprecian a los demás y tienden a ser controladores.