












La Schisandra, también conocida como Schisandra china, es una planta enredadera natural de los bosques del norte de China y el Lejano Oriente ruso. Por su parte, ésta produce una fruta llamada magnolia, o fruta de cinco sabores, y la cual contiene lignanos, siendo éstas sustancias altamente bioactivas. Así pues, la Schisandra es bien conocida por sus propiedades medicinales, las cuales se pueden remontar a tratados médicos chinos con fecha de hasta 250 años antes de Cristo. Se ha demostrado que ésta posee propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias, antioxidantes, antitumorales y tónicas. Así pues, puede usarse para combatir infecciones, reducir la debilidad (debida a una infección), cuidar la salud del corazón, ayudar a tratar la presión arterial baja, mejorar el rendimiento, cuidar la salud digestiva y aliviar la debilidad del músculo esquelético y liso. Entre otros usos de la Schisandra se incluyen su capacidad para mejorar el sistema urinario, sistema respiratorio, activar el metabolismo de los carbohidratos, acelerar la quema de grasas y aliviar el estrés. También se puede utilizar para tratar la depresión, tuberculosis, anemia, asma bronquial, bronquitis, disfunción sexual, afecciones del estómago, riñones e hígado.